Déle a la Palabra el primer lugar en su vida. Obedezca las instrucciones que Dios estableció en Josué 1:8: «Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien».
Unimos nuestra fe con la suya mientras usted ora lo siguiente:
Padre, en el nombre de Jesús, busco Tu sabiduría y confío en que Tú me guías a encontrar un mejor empleo. Viviré conforme a la misericordia y a la verdad, y no me apoyaré en mi propio entendimiento. Gracias por darme Tu favor y por abrir una puerta que nadie puede cerrar.
De acuerdo con Tu Palabra, es mi deseo vivir libre de deudas y no deberle nada a nadie, sino sólo el amarlo. Estoy dispuesto a trabajar con mis propias manos para no carecer de nada. Te alabo porque es Tu voluntad que yo sea autosuficiente en el área financiera, y así tener abundancia para suplir mis necesidades y dar generosamente a otros.
Padre, no seré impaciente ni estaré ansioso por nada, pues Tu paz habita en mi corazón y en mi mente. Mi confianza, mi bienestar y mi esperanza se encuentran en Tu provisión; pues Tú eres mi fuente. Te agradezco por suplir mi necesidad de empleo según Tus riquezas en gloria en Cristo Jesús.
Referencias bíblicas: Proverbios 3:3-5; Apocalipsis 3:8; Salmos 5:12; Romanos 13:8; 1 Tesalonicenses 4:11-12; 2 Corintios 9:8; Filipenses 4:6-7; 2 Corintios 1:3; Filipenses 4:19.